miércoles, 20 de octubre de 2010

MITOS DEL EMPRESARIO

Mitos del empresario


El proceso de creación de empresas y el ejercicio de la profesión empresarios son, una práctica que como la medicina o la ingeniería exigen conocimientos, habilidades, actitudes aptitudes y atributos, pero sobre todo trabajo para lograr la formación y el desarrollo que el proceso exige.
Mito 1: El empresario no analiza:
Los empresarios de ahora sienten un leve desprecio por los métodos convencionales de análisis formal utilizando una frase común para ellos “Yo para mis negocios, no hice nunca un estudio”. Esta posición de la idea de que el empresario es un loco, una persona a la que le plantean o identifica una oportunidad y sin ningún raciocinio o consideración se lanza y se pone en riesgo, y peor aún, pretende ilustrar esta conducta como la que conduce al éxito.
Pero sin embargo la realidad es distinta, los verdaderos empresarios no se arriesgan por corazonadas ellos analizan cada oportunidad y calculan cuidadosamente los movimientos que van a realizar.
Mito 2: L0s empresarios no nacen, se hacen:
Esta frase no se utiliza solamente con respecto a los empresarios también es utilizada con políticos, artistas, gerentes y muchos de los oficios que existen actualmente y en todos estos los casos se ha demostrado herrada.
El ser empresario implica unos atributos y unos conocimientos que son adquiridos y aprendidos. La verdad es que los empresarios se forjan mediante aprendizaje y experiencias educativas que combinan en proporciones diversas lo formal y no formal. Nadie va a negar que se requiere salud, energía, un poco de inteligencia, características biológicas necesarias pero aunque esto es importante no es suficiente; tampoco se puede negar que se adquieren habilidades que no están presentes cuando la persona nace sino que se adquieren a lo largo de la vida de empresario.

Mito 3. El empresario clásico o puro.
Existe la creencia de que sólo es empresario quien cumple todos los requisitos que se puedan formular sobre los procesos empresariales o sobre las características empresariales. Este mito es tan fuerte que incluso hay empresas consultoras y universidades que antes de aceptar un participante le hacen un examen para revisar las capacidades, conocimientos y habilidades; si las tienen los aceptan; sino lo rechazan. La verdad es que ese empresario que ya tenía todas las características no necesitaba ese entrenamiento, y que los indicadores de éxito de esas organizaciones son apenas obvios, pues so empiezan con empresarios es muy difícil terminar si éstos. La misión del proceso educativo es proveer y despertar las competencias necesarias para que una persona que no ha actuado como empresario, empiece a hacerlo.

Mito 4: Todo lo que se necesita es dinero:
En general, la falta de de dinero es más un síntoma que la causa del problema. Muchas veces la gente quiere que le den dinero para una idea general, o para una idea de negocio que no ha sido evaluada ni analizada y en la cual el presunto empresario no tiene experiencia, y claro en ninguna parte del mundo esta persona va a conseguir lo necesario. Igual ocurre con los problemas de garantías, en que todos queremos que las entidades financieras nos suelten dinero sin ningún respaldo; esto es imposible, pues éstas manejan recursos de otros y tienen el compromiso de responder por ellos.


Mito 5: El empresario es falto de preparación:
Cada día en Latinoamérica, más y más empresarios son personas con educación superior, pues indudablemente esos conocimientos no pueden perjudicar el ejercicio empresarial. Es fácil también apreciar que los empresarios todos los días mejoran su calificación y tratan de remediar su falta de conocimientos.
Todos los programas de apoyo empresarial exitosos por la capacitación de los empresarios, pues esta es la única forma de mejorar su habilidad de gestión y elevar la probabilidad de supervivencia y crecimiento de la empresa.
El empresario del futuro tiene que ser un empresario educado, formal o informalmente, de lo contrario, sus posibilidades de éxito y crecimiento no son validas. Por otro lado, el empresario conoce su negocio detalladamente y sobre éste requiere conocimiento y formación.

Mito 6: Los empresarios son los fracasados

En Latinoamérica hay una tendencia para asociar factores de degradación con solo una persona de éxito y esto pasa con los empresarios: Los despiden del trabajo por motivos de una bajo rendimiento académico, pero ninguno se acostumbra a mirar los factores positivos o por las cuales se dieron los factores negativos.

Hay una gran mayoría de las personas empleadas que son despedidas o renuncian a sus cargos más de una vez, de pronto ellos piensan que son incapaces de ocupar el puesto que tienen y por esa razón renuncian.
En ocasiones las personas estudiaron lo que no les gustaba, por que pudo haber sido su única alternativa, pero algún dia podrán desarrollar su verdadero potencial. En ocasiones los humanos no somos buenos en todo, en ocasiones una puede ser bueno como empleado mas no como empresario.

Mito 7: Todo lo que se necesita es suerte
Es muy importante que un empresario tenga actitud positiva ante cualquier ocasión, la capacidad de la suerte es aprovechar las oportunidades que se presentan en ocasiones. La idea es crearnos la suerte y no esperar a que ella nos llegue ej. crear la empresa y no esperar a que ella nos llegue
Para que un empresario sepa que esta en el lugar apropiado, en el momento oportuno y poder captar la oportunidad que circula entre nosotros, se necesita llevar a cabo un proceso de análisis de factores que es el espíritu empresarial y no de la suerte.

Mito 8: Con el primer negocio me enriquezco
Con gran frecuencia las personas intentan visualizar un negocio que en poco tiempo les resuelva sus problemas económicos, y rechazan cualquier idea de negocios por que no demuestran todo el potencial que ellos esperaban.
El proceso empresarial es un proceso en e l cual se establece demasiadas oportunidades de negocio y por lo cual es importante comenzar con el camino, aunque las primeras ideas no les van a rendir económicamente pues estas tienen la importancia de dar aprendizaje y acceso a los negocios.
El ser empresario requiere de mucho esfuerzo y practica, y es muy probable que alguno de los intentos no sean tan exitosos, hay muchos casos de empresarios famosos que han tenido varios fracasos y de ello han aprendido nuevas técnicas que luego los resultaron exitosos.

Mito 9: La mayoría de los negocios fallan rápidamente
Hay muchos casos de personas que no entran al mundo empresarial por temor a la fallas pues dicen que la mayoría de negocios fallan antes de los cinco años. La realidad es que hay demasiadas fallas empresariales y peor si las fallas fueron productivas o no. En varias investigaciones se han encontrado que varios de los empresarios exitosos tuvieron fallas, pero que de ellas aprendieron lecciones útiles para sus actividades posteriores y de ese modo constituyeron la base del éxito empresarial. No hay manera de no fallar sin nunca intentar. Es mejor equivocarse por intentar que morir virgen empresarial
Mito 10: Solo los experimentados pueden ser empresarios
Hay varia credibilidad de que las personas con mucha experiencia y con mucha edad están en condiciones de ser empresarios, pues solamente ellos tienen los recursos para producir eventos empresariales. Si observan los negocios de los últimos años sus empresarios son personas jóvenes, la Nacional federación Bussiness fue un estudio realizado en estado unidos en 1997 encontró que el 76% de los empresarios estadounidense crearon su empresa cuando tenían menos de 44 años y el 11% cuando tenia menos de 25 años.
Mito 11: La situación del país no permite crear empresas
Con mucha frecuencia se plantea cómo la situación socio-económica, política, legal y, en general, ambiental es muy difícil o poco favorable para el proceso empresarial. No es exagerado afirmar que la acción de empresarios, tanto en la economía formal como en la informal, ha impedido mayores disturbios sociales.
Esto indica que sería ideal tener un entorno económico, político y asocial mejor, en el entorno en que toca vivir es viable lograr eventos empresariales, y que no puede esperarse a que el entorno cambie para crear empresas, pues el fenómeno es el contrario: sólo a medida que se creen empresas, trabajo y riqueza, mejorarán las condiciones ambientales para reforzar el proceso.
Lo importante es identificar los mecanismos y circunstancias que limitan la actividad empresarial y que valdría la pena encontrar una solución viable.
Mito 12: Para formar empresas hay que ser inventor o trabajar en tecnología avanzada
Hay muchas empresas ejemplares que implicaron una invención o un trabajo en tecnología avanzada, la realidad es que una mínima parte de las empresas que se constituyen, aun en los países desarrollados, tienen como base estos elementos. La gran mayoría de las empresas nuevas se basan en tecnologías convencionales y conocidas.
Se requieren de muchas empresas competitivas, que atiendan nuevas necesidades o mercados no atendidos, y si para ellos se necesita tecnología avanzada hay que conseguirla o desarrollarla y aquí la formación avanzada en ciencia, tecnología y el desarrollo de mecanismos de apoyo.
Mito 13: Mi estatus profesional se rebaja por ser empresario

Hay muchas frecuencias críticas para una persona porque no ejerce el oficio normal de su profesión, e incluso hay movimientos para formular leyes que impidan que alguien que no tiene un título, pueda ejercer un oficio.
Se llegó a pensar que la función del sistema educativo era producir personas para desempeñar oficios concretos, lo cual conduce a la súper especialización desde la secundaria, a enfatizar el cómo hacer cosas, a desechar las bases científicas. El éxito profesional se mide por el cargo que la persona ocupa y el tamaño de la empresa a la cual está vinculado el profesional, sin tener en cuenta otros valores importantes en la vida profesional. Hay que entender que las profesiones son un medio de desarrollo personal y no un fin en sí mismo, y por tanto, lo importante no es el ejercicio de una profesión u otra, sino la contribución que al desarrollo económico y social brinda el profesional.
Mito 14: El empleo es seguro, los negocios no lo son
Este mito se ha arraigado a tal punto que los profesionales viven asustados por el fantasma de la pérdida del empleo. Lo cual los obliga a no tener posiciones ideológicas o conceptuales firmes, sino a ceder en sus principios como una manera de sobrevivir organizacionalmente. Este mito le indica al profesional que no debe correr riesgos y que en ese sentido debe buscar algo estable y de por vida.
Los últimos años, tanto en los países desarrollados como en vías de desarrollo, adquirir un empleo no es garantía de poder conservarlo de por vida, pues las organizaciones con gran frecuencia toman decisiones de despido de personal, y en ese momento las personas quedan cesantes y sin organización para jubilarse. Es más arriesgado el mundo empresarial; a largo plazo es más arriesgado el empleo. Por tanto, este mito hay que cuantificarlo adecuadamente y no darlo por válido sin analizar las consecuencias.
Mito 15: Mi profesión no es para formar empresas
Toda profesión tiene la opción de ser creadora de empresas, y al diseñar los perfiles de los egresados debe tenerse en cuenta este concepto básico de formación. Como se anotó: hay que formar a la gente para el trabajo creativo bien sea en una organización propia o en una organización para la cual se emplee, y no sólo para empleos burocráticos
Las profesiones son para ocupar cargos o empleos. Se ha mirado siempre con una óptica muy estrecha, pues toda persona, y mas el profesional, tiene la posibilidad de múltiples caminos de acción, y de identificar entre ellos el que más le satisfaga.

No hay comentarios:

Publicar un comentario